La colonia de buitre negro del Pirineo nos sigue dando alegrías, tras más de una década trabajando para recuperar en los cielos pirenaicos al ave carroñera más grande de Europa. Doce parejas están incubando en la Sierra de Boumort, de las 14 que iniciaron la puesta esta temporada: confiamos en que pronto podamos celebrar un número muy esperanzador de nacimientos de esta especie vulnerable en el Pirineo.
El pasado 22 de febrero, el equipo de seguimiento del buitre negro en Pirineo observó que la pareja formada por ‘Muga’ y ‘Neo’ habían comenzado a incubar en su nido, la primera puesta detectada este año en la Sierra de Boumort. Hasta que la crisis sanitaria nos obligó a pausar el trabajo sobre el terreno, detectamos que un total de 12 parejas estaban incubando. Dos parejas perdieron la puesta —aunque fue muy pronto, y estarían a tiempo de reponer un nuevo huevo— y quedan otras cinco, por lo que mantenemos la esperanza de que la cifra final de nidos de buitres negros pueda ser aún mayor. Durante este primer trimestre de 2020, hemos contabilizado 19 parejas en Boumort.
El año pasado, volaron cinco pollos (de 10 nacidos, un éxito reproductor habitual en la especie) en la Sierra de Boumort. Desde que comenzó la reintroducción del buitre negro en 2007 en el Prepirineo de Lleida, ya han salido adelante 34 pollos en la colonia, y la población actual es de más de 60 individuos, una cifra que supera el umbral de los 50 ejemplares que marca una población mínima viable.
El equipo de campo de Trenca realiza una intensa labor de seguimiento durante todo el año, pero especialmente durante la temporada de cría. Es un trabajo que nos permite conocer la evolución de la colonia pirenaica y actuar inmediatamente ante cualquier problema. “Antes de hacer la puesta acostumbran a ir al nido a última hora, para pasar la noche. Este es el momento clave durante el seguimiento, ya que es cuando nos muestran donde tienen el nido”, cuenta el técnico de seguimiento de Trenca, Gerard Plana.
Entre las novedades amorosas en Boumort, hay dos parejas que están criando por primera vez: la de ‘Mario’ y ‘Fuentes’, que se formó el año pasado, y la de ‘Bruna’ y ‘Roi’, formada esta misma temporada de cría. Este último nació en libertad en Lleida, y tanto ‘Mario’ como ‘Bruna’ fueron reintroducidos en 2007, por lo que son dos de los ejemplares más veteranos y con mayor éxito reproductivo de la colonia.
Los buitres negros ponen un solo huevo por año, y la incubación dura unos 56 días de media, por lo que a mediados de abril deberían empezar a ver la luz los primeros pollos de la temporada en el Pirineo. En cuanto las circunstancias sanitarias lo permitan retomaremos las labores de campo para confirmar los nacimientos y buscar el resto de parejas. Noticias esperanzadoras para el futuro del buitre negro en Pirineos que nos recuerdan que, cuando salgamos de casa, la vida estará esperando ahí afuera.
Trenca realiza el seguimiento de la colonia de buitre negro en Pirineos junto a la guardería de la Reserva de Boumort y otras entidades como Naturaleza Rural y Grefa. Las labores de conservación de la especie cuentan con el apoyo de la Generalitat de Catalunya, la Obra Social «La Caixa» y Endesa.